Many freeze dryer sellers on the market describe their machines by “how many kilograms or pounds they can dry.” This is often misleading. For example, users who purchase a “7 kg freeze dryer” often find that it can only hold about 1 kg of product.
The true production capacity of a freeze dryer should be defined by its lyophilization (drying) area, not by kilograms.
In the pharmaceutical industry, freeze dryers are always rated by effective shelf area. The so-called “kilogram capacity” actually refers to the condenser’s ability to collect water vapor sublimated from the frozen material—essentially, the amount of ice the condenser can trap within a certain time, such as its “maximum ice capacity” or “24-hour ice capacity.”
During the freeze-drying process, the frozen material is gently heated to make the ice sublimate into vapor. The temperature must remain below the collapse temperature of the product to maintain structure integrity. The sublimated vapor is then captured by the low-temperature condenser. The efficiency of this process depends on the condenser’s surface area and temperature—the larger the area, the more water molecules can be trapped.
However, the condenser capacity only reflects the water capture performance, not the actual loading or drying capacity. The real determining factors for how much material you can dry in one batch are: • Total shelf area • Product thickness (typically less than 1.5 cm) • Material type and structure
In food freeze-drying, materials vary widely—fruits, meats, herbs, etc.—so the same area may hold very different weights. Therefore, the only accurate and professional way to define a freeze dryer’s capacity is by its effective drying area (e.g., 0.6 m², 1 m², etc.), not by kilograms.
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Por qué es engañoso definir la capacidad de una liofilizadora en “kilogramos”
Hoy en día, muchos vendedores de liofilizadoras (freeze dryers) anuncian sus máquinas diciendo que pueden “secar X kilogramos o libras de producto”. Esta descripción suele ser engañosa. Muchos usuarios compran una liofilizadora de “7 kg” y descubren que solo pueden colocar alrededor de 1 kg de material.
La verdadera capacidad de producción de una liofilizadora debe definirse por su área de secado (superficie de bandejas), no por kilogramos.
En la industria farmacéutica, la especificación estándar de una liofilizadora siempre se basa en el área efectiva de secado. El valor en “kilogramos” se refiere realmente a la capacidad del condensador para atrapar el vapor de agua sublimado del producto congelado, es decir, la cantidad máxima de hielo que puede condensar en 24 horas o en total.
Durante el proceso de liofilización, el producto se calienta lentamente para que el hielo se sublime. La temperatura de calentamiento no debe superar la temperatura de colapso del material, para evitar daños estructurales. El vapor sublimado es capturado por el condensador a baja temperatura. La eficiencia de este proceso depende del área superficial y la temperatura del condensador: cuanto mayor es el área, más moléculas de agua puede atrapar.
Sin embargo, esta capacidad del condensador no representa cuánta materia prima puede secarse en un lote. Los factores reales que determinan la capacidad de secado son: • Área total de secado • Espesor del producto (generalmente menor de 1,5 cm) • Tipo y estructura del material
En el caso de alimentos, las diferencias entre productos (frutas, carnes, hierbas, etc.) hacen que el peso por área varíe mucho. Por eso, la forma correcta y profesional de describir la capacidad de una liofilizadora es por su área efectiva de secado (por ejemplo, 0,6 m², 1 m², etc.), no por los kilogramos.